Puede que una de las recetas que, desde pequeña, más influyó en mi amor por la repostería sea la de las famosas tortitas americanas del libro de Simone Ortega, “1080 Recetas de Cocina”.
Cuando queríamos una merienda especial en familia, casi siempre elegíamos estas tortitas y pasábamos parte de la tarde preparando la mezcla y la otra parte comiéndolas.
Aquí os dejo su receta para unas 14 tortitas (el número final dependerá del tamaño que deis a cada tortita):
INGREDIENTES
• 200 g de harina
• 1 cucharadita y media (de las de moka) de sal
• 3 cucharaditas (de las de moka) de levadura
• 1 cucharada sopera de azúcar
• 1 cucharada sopera de aceite
• 2 huevos
• 1 vaso de leche fría
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Primero tenéis que mezclar en un recipiente la harina (tamizada) con la sal y la levadura.
En otro recipiente, batir los dos huevos y añadir el aceite y la leche.
A continuación, incorporar poco a poco la mezcla de harina, sal y levadura a los huevos. Es importante batir deprisa y por poco tiempo, preferiblemente con unas varillas. No os preocupéis si queda algún grumito, se deshará al cocinar la tortita. Una vez batido, guardar la mezcla en una jarra y meter a la nevera unos minutos.
El próximo paso es calentar una plancha o sartén antiadherente (también se puede poner un poco de mantequilla para engrasar) y verter un poco de la mezcla. La cantidad variará dependiendo del tamaño que queráis que tengan las tortitas. Yo siempre recomiendo empezar echando poca cantidad para hacernos una idea de lo que se necesita, ya que cunde más de lo que parece.
Una vez empiecen a aparecer burbujitas (unos 2 minutos), dar la vuelta con la ayuda de una espátula. Estarán listas cuando ambos lados tengan un bonito color dorado.
Aparte de los siropes habituales (chocolate, caramelo, vainilla…), siempre podemos acompañarlas de opciones menos comunes, como sirope de arce o miel, o incluso algunas un poco más elaboradas.
Para la próxima ocasión, ¿por qué no probáis a hacer una mermelada de fresa casera y cortáis un plátano encima?
